jueves, 20 de agosto de 2020

CRIATURAS DE LA NOCHE. Lázaro Covadlo

 Premio de novela café Gijón del año 2004, contiene un planteamiento ingenioso, divertido y mefistofélico que su irregular desarrollo no termina de cuajar por culpa de una trama débil que se deja arrastrar por lo que va pasando por la mente del escritor sin apenas filtro.

El argumento es muy curioso: Dionisio, un mindundi metepatas con ínfulas de rico empresario, vive en la pobreza y el desamor por su incapacidad para cerrar la boca a tiempo.

Una noche de pesadillas oye una voz que le llama. En su búsqueda es mordido por algo que lo deja sin sentido. Al despertar resulta que tiene instalada en el oído como inquilina una Pulga fastidiosa que, a cambio de un poquito de su sangre, promete hacerle rico y exitoso con las féminas si sigue los consejos que va dictándole en la trompa de Eustaquio.

Lo que ocurre es que la Pulga, que cuenta con un currículum de huéspedes eminentes a lo largo de la Historia, tiene unos caprichos y exigencias digamos un poco extravagantes que convertirán la existencia de Dionisio en una continua zozobra.

Mientras nos divertimos con las perversiones del parásito canalla, en el trasfondo hallamos una metáfora de nuestro mundo contemporáneo en el que el triunfo a toda costa (sexo, dinero y poder) nos empuja a vender nuestra alma al diablo.

No había leído nada de este autor, es mi primer acercamiento a él y a pesar de contar con un buen cartel entre los lectores, no me ha calado. Se me hace difícil de entender la concesión del premio más allá de su originalidad, aunque me comentan que no es su mejor escrito. Habrá que probar con sus cuentos para juzgar con más criterio.

Entretenida y procaz, con un estilo narrativo entre la sencillez casi infantil de la fábula y la reflexión adulta, sirve para pasar un buen rato.

Sybilalibros@YoLibro

 

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